La vicepresidente sumó su primer triunfo ante el kirchnerismo.
Eligieron al Presidente Provisional, el Secretario Administrativo y el Secretario Parlamentario.
En una jugada arriesgada, la vicepresidenta Victoria Villarruel sumó su primer triunfo legislativo: acordó con todos los bloques de la oposición para doblegar al kirchnerismo -que tiene el bloque más numeroso- y así tuvo el quórum necesario para imponer a las autoridades del Senado y retener el control de las comisiones.
El oficialismo logró designar a Bartolomé Abdala como Presidente Provisional del Senado, pero también aprobaron secretarías clave y el reparto de comisiones.
En la primera sesión en seis años en la que Cristina Fernández de Kirchner ya no integra el Senado, entre 2017 y 2019 como senadora y de 2019 hasta el fin de semana pasado como vicepresidenta de la Nación y presidenta del cuerpo, Villarruel logró 38 senadores de los 37 requeridos para el quórum.
Elegidos los principales cargos, ahora la clave está en la estrategia para distribuirse las comisiones. Como el bloque mayoritario es el Frente de Todos, con 33, plantearán que no se haga bajo la lógica de bloque, sino de una mayoría y minoría. Ellos -La Libertad Avanza, el PRO, la UCR, y los bloques federales y provinciales- se presentarán con la mayoría de 39.
Así se quedarían con más números dentro de cada comisión y después se encargarán de distribuirse los lugares entre ellos.
Los cargos que el oficialismo logró designar en el Senado
El nuevo oficialismo no solo buscaba elegir al presidente provisional, sino también a otras autoridades clave de la Cámara alta: el secretario Administrativo, que maneja la caja del Senado, y al secretario Parlamentario que decide, por ejemplo, los giros a comisiones que van a tener los proyectos, con lo cual puede agilizar o ralentizar debates.
El formoseño de La Libertad Avanza, Francisco Paoltroni, había sido confirmado semanas atrás como presidente provisional del Senado por un documento de la Oficina del Presidente Electo pero después tuvo actitudes que cayeron mal en la bancada y la vicepresidenta lo puso en duda.
Finalmente Bartolomé Abdala, senador de LLA de San Luis fue elegido por 39 votos como Presidente Provisional del Senado, mientras que hubo 29 abstenciones del peronismo. Abdala es un hombre con pasado político: fue funcionario de los hermanos Rodríguez Saá y luego fundador del PRO de Mauricio Macri en San Luis.
Mientras que el oficialismo dejó la vicepresidencia del Senado para el peronismo, que no eligió a su candidato, la radical Carolina Losada fue elegida vicepresidenta primera del Senado. Y como vicepresidente segundo del Senado fue votada la senadora por Córdoba Alejandra Vigo, esposa del ex gobernador cordobés, Juan Schiaretti.
A su vez, como secretaria administrativa, Villarruel propuso y logró imponer a María Laura Izzo, una empleada del ministerio de Seguridad. Como secretario Parlamentario a Agustín Giustinian, un empleado de la cámara que trabajó en el bloque PRO, y quien ya se mostró cerca de Villarruel el día de la jura de legisladores.
El peronismo salió a criticar a la titular de la Cámara alta y trató la sesión de “ilegal ilegítima e inconstitucional”.
El peronismo bajó una vez que arrancó la sesión y el primero en tomar la palabra fue el peronista de Formosa, José Mayans, para plantear la ilegalidad de la sesión porque no hubo un pedido del Poder Ejecutivo para iniciar sesiones extraordinarias. “Esta sesión viola la Constitución y el reglamento del Senado”, dijo el titular del principal bloque opositor y criticó a Javier Milei por dar el mensaje a la calle el día de la jura y no a la Asamblea Legislativa.
En un inicio picante, antes de que empiece la sesión, Mayans criticó las medidas económicas del gobierno: “Vimos un discurso del Presidente plagado de mentiras y de inexactitudes. El pueblo argentino está sorprendido, votaron dolarización y tuvo devaluación”. A su vez, adelantó que se abstendrán de la votación de autoridades por considerar que la sesión es “ilegal ilegítima e inconstitucional”.
Tras las críticas de Mayans, pidió la palabra Juliana Di Tullio, que habló de “prepotencia de número”, porque el nuevo oficialismo consiguió el quórum para tratar las autoridades. “Ayer no hubo reunión de labor parlamentaria”, le retrucó Di Tullio a Villarruel.
En el peronismo los acusan de querer “revivir el grupo A”, la experiencia parlamentaria de 2009 en la que toda la oposición se unió en Diputados para quitarle al kirchnerismo el control de las comisiones. “Que lo hagan, vamos a ver después cómo les va después”, advierten en el peronismo, donde creen que esta demostración de fuerza va a durar poco.
Di Tullio mencionó al “Grupo A” y acusó a la Libertad Avanza de haber prometido secretarías y cargos con sectores de la oposición para que le dieran el quórum. A modo de chicana los llamó “el grupo motosierra”.
Por Jazmín Bullorini – Redactora de la Sección Política
Fuente.- https://www.clarin.com