La cocina basada en plantas, impulsada por una mayor conciencia sobre la salud y el medio ambiente, se consolida como una alternativa que va más allá de la moda. Cómo se está adaptando la industria a las nuevas demandas de las generaciones jóvenes. Los datos que demuestran el cambio.
El concepto de plant-based o basado en plantas cobró fuerza en los últimos años, especialmente entre las nuevas generaciones, que buscan un equilibrio entre lo que consumen, su bienestar y el impacto ambiental de sus elecciones alimenticias.
Este cambio de paradigma no es una moda pasajera, sino una tendencia sólida que está rediseñando la industria alimentaria a nivel global. Lo que comenzó como una opción alternativa para algunos, hoy se consolida como una de las tendencias más importantes en la alimentación moderna. Las generaciones más jóvenes están liderando este cambio, movidos no solo por el deseo de mejorar su salud, sino también por una creciente conciencia ambiental.
Según el informe Taste Tomorrow, que elabora Puratos, la firma de insumos para la industria panadera y pastelera, los números reflejan ese movimiento:
El 72% de las personas compra regularmente alimentos de origen vegetal, motivados tanto por su impacto positivo en la salud como en el medio ambiente.
El 69% de los consumidores cree que los alimentos basados en plantas son más saludables que los de origen animal. El 72% está de acuerdo en que estos productos tienen un efecto beneficioso sobre el medio ambiente.
Las nuevas generaciones colocaron a la salud y la sostenibilidad en el centro de su vida cotidiana. Ya no se trata solo de comer para nutrirse, sino de comer con propósito. Las decisiones alimentarias ahora implican una profunda reflexión sobre el origen de los alimentos, los ingredientes que contienen y cómo estos impactan no solo en el cuerpo, sino en el planeta.
La preocupación por el origen de los alimentos
La transparencia se volvió una exigencia de los consumidores. El 78% de las personas quiere saber de dónde provienen sus alimentos y cómo se fabrican. Esta búsqueda de honestidad y trazabilidad forzó a la industria a repensar sus procesos y ofrecer productos que cumplan con estos nuevos estándares.
En este sentido, Puratos destaca cómo la alimentación basada en plantas no solo tiene que ver con el cuidado del medio ambiente, sino también con una mayor conciencia sobre la salud.
Los consumidores leen más que nunca las etiquetas, buscan ingredientes naturales y menos procesados, y esperan que las empresas hagan más por preservar el medio ambiente. De hecho, según el informe, el 90% de las personas revisa la información de los envases buscando detalles sobre los ingredientes utilizados, los valores nutricionales y el origen de los productos.
Plant-based: más que una tendencia, una transformación
A menudo se habla del movimiento vegano o plant-based como una moda, pero los datos demuestran que va más allá. Este enfoque alimenticio llegó para quedarse y está moldeando una nueva realidad en la industria. Como señala el informe de Puratos, las expectativas van más allá de lo saludable; los consumidores buscan alimentos que mejoren su sistema inmunológico (80%), y alimentos que contribuyan a una buena salud mental y gastrointestinal, abriendo nuevas oportunidades para que productos como el pan y el chocolate jueguen un papel protagónico en estas áreas.
El desafío para la industria es aggiornarse, es decir, adaptarse a estas nuevas exigencias sin comprometer lo esencial: el sabor, la textura y el precio. A medida que los consumidores se alejan de los ingredientes altamente procesados y buscan opciones más naturales, se espera que las marcas respondan con innovaciones que respeten la esencia de los alimentos y ofrezcan alternativas sostenibles y saludables.
Alimentación y medio ambiente: una relación clave
Las nuevas generaciones están profundamente comprometidas con la reducción de su impacto ambiental. Según el estudio Taste Tomorrow, los consumidores valoran cada vez más los productos que son amigables con el medio ambiente y están involucrados en la conversación sobre la reducción de residuos, procesos de producción más sostenibles y reciclaje. De hecho, las decisiones de compra están cada vez más influenciadas por el deseo de elegir alimentos que respeten el planeta.
Las empresas, por tanto, no solo deben ofrecer productos saludables, sino que también deben garantizar que sus procesos de producción sean sostenibles. Esto abarca desde el uso de ingredientes orgánicos y locales, hasta el desarrollo de envases reciclables que minimicen el impacto ambiental.
El Día del Veganismo invita a reflexionar sobre el futuro de la alimentación. Los nuevos consumidores no solo exigen alimentos que nutran sus cuerpos, sino que también se preocupan por el origen de esos alimentos y el impacto que tienen en el mundo.
La industria de la panadería y pastelería, junto con otras ramas del sector alimenticio, tiene la oportunidad de liderar este cambio ofreciendo alternativas basadas en plantas que no solo cumplan con las expectativas de sabor, sino que también se alineen con los valores de sostenibilidad y salud que son tan importantes para las nuevas generaciones. El futuro de la alimentación es claro: es con opciones plant-based, es sostenible, y está profundamente conectado con la salud del planeta y de quienes lo habitamos
Gentileza.- Gabriela Fabrizio – http://agencia-vox.com/